El castillo fue construido por los árabes. Era la residencia del delegado del wali de Siurana que gobernaba parte de la Ribera del Ebro y más allá. El castillo, convertido en comanda templaria, pasó a manos de los hospitalarios en 1317 tras la disolución de la orden. Este está dominado por una torre principal cuadrada, la garita.

Las prospecciones arqueológicas realizadas en los últimos años, han dejado al descubierto diferentes estancias de este impresionante castillo.

La visita guiada permitirá al visitante conocer la apasionante historia del lugar y al mismo tiempo disfrutar de las maravillosas vistas desde la terraza de la garita.

Acabaremos con una cata de vinos ofrecida por la Agrícola Sant Jaume de Benissanet.